Turismo en El Tío

 

Al este de Córdoba esta región regala numerosos encantos y bellezas paisajísticas para conocer. Se distingue por su relieve predominante llano, lo cual permite ofrecer postales infinitas y emocionantes de los verdes más diversos.
Sus espaciosos campos cultivados van formando cuadros de múltiples matices, y otros tantos utilizados por el ganado, le brindan un encantador aire campestre y tranquilo. Y se van combinando con toda esa naturaleza nativa que florece al paso del visitante, invitándolo a deleitarse de maravillosos avistajes de aves y animales en general.

Con una topografía sin ondulaciones la localidad de El Tío, admite admirar inolvidables crepúsculos; hacer largas y divertidas caminatas, las excursiones en bicicleta son otra opción imperdible para encontrar los tesoros naturales de estas zonas cordobesas; y para perpetuar los descubrimientos de la cultura campestre, los safaris fotográficos es una opción que no se puede pasar por alto.

Y hay más para deleitarse la exquisita gastronomía regional es otra de las sorpresas que El Tío tiene preparada para quienes la prefieran, con manjares y platos típicos de la cocina hogareña, los cuales se pueden disfrutar en los comercios del lugar, en los que igualmente se podrán adquirir artesanías ejecutadas por sus lugareños, empleando la materia prima que les regala este hermoso espacio cordobés.

Solo unas pocas cuadras constituidas a ambos márgenes de la ruta, le dan forma a este compuesto urbano en el que prevalecen las casas bajas; los espacios verdes; y la serenidad en su máxima expresión.

 

El paseo por este encantador rinconcito, permite admirar una atractiva Iglesia; una encantadora Plaza, y un Museo que se desempeña en la arcaica Estación del Ferrocarril. El recorrido por la localidad invita a descubrir cómo el pasado y el presente se funden en esta calma comunidad cordobesa.

El Tío posee ese espíritu único que muestran las pequeñas localidades, y la serenidad exclusiva que la invade, resulta un rincón conmovedor para aislarse del ritmo frenético que imponen las grandes urbes.