Turismo en La Granja, Cordoba

En un verdadero paraíso serrano, de penetrante verde y terrenos irregulares, son numerosas las atracciones que el visitante puede encontrar. El turismo en La Granja, Sierras Chicas, propone la caza de palomas que cautiva a los extranjeros seguidores a esta especialidad.

La Granja cuenta igualmente con una maravillosa cancha de golf y sencillas estancias que plantean la práctica del turismo rural. Los visitantes podrán complacerse de largas y entretenidas caminatas y campamentos en contacto directo con el aire libre y la fresca brisa serrana.

Los que quieran hacerse una escapada para conocer las sorprendentes Tres Cascadas, La Granja, sugiere diferentes y divertidas formas de llegar al paradisíaco lugar.

Realizando trekking podrá costear el bello río aguas arriba y cruzar las montañas con tres horas aproximadas de caminata. Otra de las opciones es la cabalgata por caminos silvestres o paseos en mountain bike. Cualquiera de las seducciones que elija en La Granja es un viaje asegurado al goce.

 

La Granja posee un rio que nace en la ladera oriental de las Sierras Chicas y atraviesa el corazón de la localidad del mismo nombre. Sus calmosas y cristalinas aguas corren entre los márgenes de una flora abundante y una llanura rocosa. De un lado, el denso verde de sus bosques abriga los senderos que invitan a la caminata. Al otro lado del río, una planicie perfecta para realizar campamentos y disfrutar de las acciones al aire libre. Un divino cauce que se amplía para entrar a las piletas naturales que forman los típicos balnearios de la zona. La Granja ostenta asimismo una variada oferta de alojamiento como los campings, casas de alquiler y modernas cabañas, que esperan al viajante para sumarle comodidad a esta belleza natural. En el centro del pueblo en la Plaza San Martín, se puede visitar la antigua Capilla de Nuestra Señora de Lourdes, que data de mediados del siglo pasado. Transitando la ruta, el paisaje serrano se enriquece con el distinguido castillo de Roger Agst, ubicado frente a una pequeña laguna artificial y cimentado con un particular estilo arquitectónico. El motivo que lleva a conocer este pequeño pueblo, es que se halla inmerso en la belleza de las sierras chicas.